Día 10. 9:30 horas. Desafíos


Kitsune Aoshi

Lun Jul 11, 2005 11:26 pm

Aoshi estaba furioso.

La sangre le hervía y su rostro no era nada amable. Había salido de la sala humillado y furioso. Maldito Grulla de afilada lengua. A fé suya que se la cortaría esa lengua con su espada personalmente. Y eso que Shôtarô le había parecido un hombre muy cortés y agradable. Incluso había mediado por él cuando Kaoru le amenazó. No comprendía porqué el poeta había vuelto sus palabras contra él avergonzándole delante de la daimyo como si al hablar estuviese despreciando la persona de Ryosei.

Aoshi estaba tan furioso que casi no oyó como la puerta se abría.

Casi.

Aoshi miró hacia el rakugoka con un fuerte odio saliendo por sus ojos y avanzó hacia él, amenazador. Estuvo a punto de sacar el tanto que siempre portaba consigo oculto y clavárselo allí mismo.
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"Vamos, cabrones! O acaso queréis vivir para siempre?" Han Daly, Junio 1918


Kakita Shôtarô

Mie Jul 13, 2005 8:26 pm

Shôtarô salió de la entrevista con la daimyo Kitsune con una sensación agridulce. La actuación improcedente de Kitsune Aoshi había empañado la conversación.

De todos modos, no iba a dejar que eso le aguara el resto del día.

Lenta, pero tranquilamente, salió de los aposentos de la daimyo para dirigirse a los suyos propios.

Parecía que iba a tardar un poco más de lo esperado en llegar. Kitsune Aoshi estaba afuera y se dirigía hacia él.
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Se coge antes a un mentiroso que a un Shôtarô


Kitsune Aoshi

Sab Jul 16, 2005 7:08 pm

- Kakita Shôtarô-sama. -escupió el zorro con rabia contenida. Su furia era visiblemente mal contenida.

- Sois un perro insolente y me habéis faltado al respeto. Exijo una inmediata disculpa por vuestra impertinencia.
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Kakita Shôtarô

Sab Jul 16, 2005 7:13 pm

Shôtarô se quedó quieto. Ni el mas rudo de los Cangrejos hubiera sido tan estúpido como para insultarlo así.

- ¿Se puede saber quien os creeis que sois para mostrarme esa falta de respeto? Deberíais volver a Kistune Mori, pues parece que os habeis dejado el Código del Bushido allí. Exigo una pronta disculpa.
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Kitsune Aoshi

Sab Jul 16, 2005 7:27 pm

La primera respuesta de Aoshi fue un revés con la derecha en la mejilla del rakugoka. Hasta el guardia de la puerta de los aposentos de Ryosei se sobresaltó y se llevó la mano a la empuñadura de su arma.

Al ver que el Grulla perdía algo el equilibrio, sintió una punzada de culpa y lamentó haber reaccionado así. Però la rabia le podía.

- No os hagáis en ofendido. Os he exigido una disculpa.Disculpaos aquí o hacedlo con vuestra sangre en el campo del honor. O es que sois tan cobarde que no podéis defender vuestras insolencias con hechos?

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Kakita Shôtarô

Sab Jul 16, 2005 7:33 pm

Shôtarô cayó al suelo de culo. No le dolía la bofetada por el daño que le pudiera haber hecho, le dolía la bofetada al ver como un samurai podía caer tan bajo al golpear a un lisiado.

- ¿De que me debo disculpar, de que seaís un bocazas? Un samurai que no sabe utilizar su katana, se acaba cortando. Un samurai que no sabe utilizar su lengua, se acaba deshonrando él solo. Y eso es lo que habéis hecho, deshonraros. ¿Me pedís que me disculpe por eso?¿Por no dejar que insultarais libremente la posición que ocupo en mi clan? ¿Por que debo disculparme, Zorro?
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Kitsune Aoshi

Dom Jul 17, 2005 12:51 pm

Vos os deshonrastéis poniendoos en evidencia ante Ryosei-dono presumiendo de hablar como si todo vuestro clan respaldase vuestras falsas lisonjas! Y habéis insinuado, en presencia de mi señora, que yo hablaba por ella incluso con ella presente, como si fuese uno de esos muñecos de paja que vuestro clan tiene por damas. Pues yo sí que hablo en nombre del Zorro, con el consentimiento y confianza de Ryosei-sama. Vuestra insinuación de que mi señora tan sólo es hábil para que toméis el té con ella y que yo estoy para hablar de política, es un insulto al Zorro, a su daimyo y a mí. Debéis disculparos por vuestra falta de cortesía, por vuestra insolencia, por vuestra carencia de respeto y por vuestra impertinencia. Si creéis que por ser un lisiado podéis ir insultando a cualquiera sin temer las repsresalia, entonces no es vuestra pierna lo que os falla, sino la cabeza. Os exijo que os disculpéis o lo paguéis con vuestra sangre!

Pensó como un ralámpago. Iba a decírle todo aquello al poeta, però era evidente que con la mirada ya trasmitía aquellos pensamientos.

Aquellas venenosas palabara eran profundamente impropias de Aoshi. Incluso más allá de lo mínimamente aceptable. Una parte de él sentía cada segundo un mayor peso de la culpa y la vergüenza. Se estaba deshonrando y, con él, al Zorro. Se rostro estaba rojo de ira. Sentía como al golpear a un lisiado se había rebajado como samurai, haciendo algo muy cruel.

El aire, por un instante, quedó helado. Los ojos de Shôtarô parecían mirarle fíjamente, carentes de vida. Inmóvil, petrificado. Una voz femenina le llamó desde detrás.

- Se puede saber qué estás haciendo Aoshi?


El joven se giró. Tras él, una mujer, muy hermosa, de ojos verdes, vestida con un quimono ya pasado de moda le miraba con cara de reproche. Ya había visto aquella cara. En otros lugares, però nunca en la realidad.

- Quién eres? - Inquirió Aoshi, con voz aún exaltada, aunque intuía la respuesta.

Antes que la respuesta, le llegó una rápida bofetada.

- Soy tu bisabuela Rimiko. Y cuando me hables a mí, procura no usar ese tono.


- Bisabuela?? Però tú, tú... estás... estás...


- Muerta Aoshi. Ya sabes de que se trata, no? Morirse... le pasa a casi todo el mundo.- el rostro de Aoshi cambió de expresión hasta quedar muy lívido.- Y hazme un favor. No me mires así. Se te queda cara de tonto cuando pones esa expresión.

- Sí, bisabuela.- respondió inconciente un súbitamente sumiso Aoshi. A su alrededor, era como si el tiempo se hubiese detenido. Shôtarô permanacía inmóvil. El guardia también estaba congelado. El silencio rodeaba a Aoshi y Rimiko.

- He venido porque te estás pasando de la raya, sabes? Has ido demasiado lejos y no debes continuar por ese camino. Qué has hecho, zorrito? Pegarle a un hombre incapaz de defenderse? Quieres desafiar a alguien que necesita un bastón para caminar? Así remedias tu honor? Me avergüenzo de tí. Eres inmerecedor de mi herencia y mi sangre.

- Però bisabuela....

- Però bisabuela qué? - la voz de la difunta se tornó restallante cual látigo- No es tu honor lo que ha insultado ese bocaza. Es tu ego. Tu arrogancia. Dónde se ha quedado aquel chico feral y tímido? Qué fue del risueño y serval niño que corría desnudito para tirarse a los arrollos de Kitsune Mori?

Aoshi bajó los ojos, avergonzado y triste.

- Ese chico murió. Murió en uno de los cotos de caza imperiales. Murió cuando murió Sukume.

Otra bofetada golpeó la mejilla del zorro. Se llevó la mano a la dolorida cara.

- Quieres dejar de decir sandeces? No murió. Yo me habría dado cuenta. Y tú también, sabes? Tú sólo te haces la víctima. Llorica malcriado! Me avergüenzo de tu falta de criterio y de tu arrogancia victimista. Mi nieta no te educó así. Y tu padre tampoco. Mira a Shôtarô. Qué ves? -Aoshi miró al Grulla postrado. Junto a él, apareció la imagen de Shiiko, que le miraba con atención, con aquellos ojos dulces y pícaros - Qué ves!?

- Shii-chan, a su lado. Porqué? Qué tiene que ver ella?

- Vaya un zorro de tercera te has vuelto Aoshi. Shôtarô es uno de nuestros posibles futuros. Si las cosas se desarrollan de determinada manera, ellos podrían concebir a mis futuros tataranietos. O quizás no. Però tanto sí como no, tú lo estás complicando todo. Tu falta de respeto, tu arrogancia, está destruyendo algunos futuros para nuestra querida Shii-chan. No debes derramar la sangre de Shôtarô de manera innecesaria. Un pequeño arroyuelo ha nacido estos días en la Corte entre ellos, y sólo las Fortunas saben si debe convertirse en río. Però tú no eres quien para desviar su curso sin motivo.

- Però es un Grulla!

- Lo dices como si fuese algo malo. Es un hombre. No es tan importante el color de su ropa sino el de su alma. Y no te socorrió él de motu propio frente a Kaoru? Y lo hizo con toda su buena intención. Eso no indica un buen espíritu? Crees que un alma sucia podría expresar lo que sus palabras expresan? Yo creo que no. Es un posible futuro muy aceptable y deseabla... y además, es guapo... - río despreocupada la finada Rimiko.

Aoshi guardaba silencio mientras miraba al rakugoka caido. La imagen de Shii-chan se difuminó en el aire. Rimiko posó su mano sobre el hombro de Aoshi.

- El clan te necesita, Ao-chan. - su voz se tornó más tierna- Han nacido otros arroyuelos en esta laguna del Karma que es la Corte. Y algunos necesitan de tí. El clan necesita de tí. Incluso el Imperio necesita que cumplas con tu deber. Y no puedes fallar a tu deber. Debes hacer lo que debes hacer. Y dejar ya el pasado ir. No sigas corriendo hacia el precipicio. Sukume no quiere que sigas esta carrera suicida.

Aoshi levantó la mirada. Junto a la bisabuela estaba Kitsune Sukume, su amante muerta por bandidos.

- Sukume...- murmuró Aoshi mientras los ojos se le llenaban de lágrimas.

- Ao-chan. Mi amado zorrito. - le dijo la dulce voz de la joven shugenja muerta. - Que guapo estás vestido como una persona.

- Sukume, te echo de menos... yo.. yo...

- Lo sé Ao-chan. Però no quiero que vengas a este lado. Aún no. No sin completar tu karmah. El mío se truncó, però no hay necesidad de romper el tuyo. Debes completarlo y procurar ser feliz. Es lo que yo deseo. Nada cambiará lo que vivimos juntos. Es un error que creas que sólo yo te quiero. Tus padres te quieren. Tus hermanos te quieren, y te necesitan. Ryosei te quiere. Y tienes amigos que también te quieren. Yo deseo que vivas y que cumplas tu deber. Y sé que no fallarás en tu deber.

Aoshi vaciló, mientras el dolor recorría cada uno de los poros de su piel y cada rincón de su mente.

- Però te echo tanto de menos...

- Lo sé, y yo a tí. Però seguimos juntos. Aquí. dijo mientras se ponía la mano sobre el corazón.- Yo sigo contigo y tú conmigo. Nos reuniremos cuando sea el momento. Lo harás? Por mí, Ao-chan? Por tí? Por nosotros?[/color]

- Sí. Por nosotros. Lo prometo.

La imagen de Sukume le dirigió una sonrisa y le dió un tierno beso de despedida.

- Ya lo sabía, Ao-chan. Y recuerda que sigo contigo. Sé feliz.
-Tras lo cual, la imagen desapareció.
Ya sabes Aoshi. Haz lo que debes hacer, no me falles y sé feliz-Dijo Rimiko.Tras eso, se separó del chico. Y le propinó otra torta.

- Però porqué me pegas ahora?- exclamó el dolorido zorro.

- Para que no lo olvides jovencito!- le dijo la bisabuela. Después sonrió pícara y le guiñó un ojo. Tras aquello desapareció. El aire recobró la consistencia normal. Notó como le miraban el guardia y el Grulla. Supo que no habían visto nada.

Sintió profunda pena y culpa por haber derribado a Shôtarô de manera tan cruel.

Se le acercó, de manera suave pero firme, Le ofreció sus manos mientras se arrodillaba a su lado.

- Vos tenéis razón, Kakita Shôtarô-sama. Me habéis demostrado mi error y mi vergüenza. Me permitís que os ayude a levantaros, por favor?
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"Vamos, cabrones! O acaso queréis vivir para siempre?" Han Daly, Junio 1918


Kakita Shôtarô

Dom Jul 17, 2005 8:35 pm

Shôtarô se quedó pensativo. En dos días, dos Kitsune le habían tirado al suelo. Empezaba a ser una situación demasiado repetitiva para su gusto.

Miró a Aoshi. Miró a sus ojos. Sabía que las palabras podían decirse de muchos modos, así que miró a sus ojos para comprobar la sinceridad de ellas.

Vio arrepentimiento. Sin saber porqué, su mirada había cambiado. Shôtarô pensó que al tirarle al suelo, el Kitsune vio que había llegado demasiado lejos.

Una palabra se cruzó en su mente. Jin. Compasión. La doctrina del Bushido que hacía mostrar misericordia a aquel que es inferior. Y Aoshi, después de dejarse llevar por su rabia y arrodillarse mostraba esa inferioridad al no haberse podido controlar.

- Si, por favor. - dijo Shôtarô mientras se agarraba de la manga del kimono del Kitsune para auparse.

Se reincorporó.
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Kitsune Aoshi

Dom Jul 17, 2005 8:49 pm

Una vez que Shôtarô estaba de pie, en condiciones más dignas, Aoshi volvió a arrodillarse.

- Kakita Shôtarô-sama. No tengo palabras para expresar la vergüenza que siento por lo que ha sucedido. He avergonzado a mi familia y a mis ancestros. No merezco ni portat en apellido que llevo. Os ruego que aceptéis estas disculpas que os ofrezco con toda mi alma. Aceptaré el castigo que solicitéis a mi señora que se me imponga sin protestar. Lo que he hecho, está mal, y mis palabras estaban cargadas de ira. Gomen kudasai, Kakita Shôtarô-sama.
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Kakita Shôtarô

Dom Jul 17, 2005 9:16 pm

- Con vuestras disculpas se cierra el asunto. No soy quien para pediros un cástigo, pero si me permitís pediros algo, os pido que no vuelva a suceder lo ocurrido. No volvais a insultarme a mi y menos a mi Clan y a mi familia. Con eso es suficiente, y con eso acepto vuestras diculpas.
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Kitsune Aoshi

Dom Jul 17, 2005 9:36 pm

- Sois un buen hombre y un samurai generoso. Agradezco vuestra buena voluntad y tenéis mi palabra que no se volverá a repetir., Kakita Shôtarô-sama. Os tendré muy en cuenta ese reflejo de vuestro ki tan honesto en el futuro. Domo arigatô gozaimasu.
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Kakita Shôtarô

Dom Jul 17, 2005 9:41 pm

- Entonces, si me permitiis, volveré a mis aposentos sin más demora. Ja ne.

Shôtarô hizo una inclinación con la cabeza, esperando que el Kitsune dijera sus palabras de despedida, tras lo cual marcharía a descansar.
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Kitsune Aoshi

Dom Jul 17, 2005 9:48 pm

- Matta nê, mi señor.- Dijo Aoshi deseando acabar pronto con aquello. Cuando Shôtarô se giró, Aoshi entró el los aposentos de Ryosei. Quería contarle lo sucedido y despachar con ella.
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Soshi Mishi

Lun Jul 18, 2005 4:13 pm

Ryosei se encontraba peinando un mechón rebelde con un sencillo peine de madera, a pesar de que no lejos de ella, en un completo equipo de maquillaje destacaba, junto a un espejo auténtico (no plata pulida), un cepillo de marfil de excelente factura. Uno de los obsequios del enviado de Yoritomo.

-Pareces agitado, Aoshi-san. ¿Qué sucede?
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"Que Benten os guíe en todas vuestras acciones"


Kitsune Aoshi

Lun Jul 18, 2005 6:05 pm

Aoshi se arrodilló junto a Ryosei, con la mirada baja y se sentó.

-Dejadme que os ayude, por favor.
- dijo Aoshi tomando el peine y sentándose ahora más cerca, comenzando a peinarla- He hecho algo muy malo, mi señora. Las palabras de Shôtarô me parecieron un grave insulto hacia vos, porque os menospreciaban y hacia mí, por humillarme. Vos sabéis que no tengo interés alguno en la gloria ni en la fama. Però no tolero que pisoteen mi honor no el de vos, por muy Grulla que sea. La verdad es que, he perdido los nervios.

Cuando Shôtarô ha salido, le he gritado y exigido una disculpa. Él me ha llamado bocazas y le he dado una torta... y se ha caido. Lo siento, muchísimo. -
Deja de peinarla mientras agacha la mirada, avergonzado-. Lo siento, de verdad. Me avergüenzo de lo que he hecho, pegarle a un lisiado y dejarme llevar por mis emociones de esa manera. Me he avergonzado y, conmigo, al clan.

Entonces, he tenido una visión, de mi bisabuela, recriminándome mi actitud. Ha venido para mostrarme mi falta de respeto y mis carencia de integridad. Y con ella... vino... veréis, mi señora. Vino Kitsune Sukume... que estaba al servicio del Hijo del Cielo y falleció hace unos meses. Yo... ella... nos conocimos. De hecho, yo estuve cuando falleció, víctima de la lucha con unos bandidos... -
curiosamente, no le dolía tanto esta vez al hablar del tema- yo casí morí, però unos campesinos me curaron. Ella y yo éramos... éramos... bueno... Cuando descubrí el secuestro de nuestro kitsune iba camino de Kyuden Kitsune a solicitaros el seppuku... Bueno, la cuestión es que su espíritu también me habló y me demostraron mi vergüenza.

Entonces me agaché y ayudé a Shôtarô a levantarse y le pedí perdón. Le dije que aceptaría cualquier castigo que os solicitase. Però me dijo que no desaba más castigo que mi promesa de que no volvería a insultarle a él y a su clan. Se lo prometí. Però vengo a solicitar vuestro perdón, mi señora. Aceptaré sin protestar el castigo que me impongáis, pues me lo he ganado a pulso. Como siempre, mi vida y mi alma, son vuestras.


Aoshi está canizbajo, mirando el peine, con el rostro triste però satisfecho de haber sido honrado y haber confesado su pecado.
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Soshi Mishi

Mar Ago 02, 2005 7:01 pm

-No os voy a castigar, Aoshi-san. Vuestro Honor ya se ha visto disminuido como consecuencia de ese acto hacia Kakita Shôtarô-san. Simplemente... aprended a controlaros un poco más. Por el bien del Zorro.
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Kitsune Aoshi

Mar Ago 02, 2005 7:09 pm

- Sí, mi señora- dijo un muy compungido Aoshi, más dolido por haber decepcionado a Ryosei que por haberse deshonrado.
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Soshi Mishi

Lun Ago 15, 2005 1:12 pm

-Ahora ocupad vuestra mente en otros asuntos, como es el caso del Mantis. Había pensado en invitar a tomar el té a un samurai, Nimura, pero no hay manera de localizarle. No sé si he de seguir esperando.
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Kitsune Aoshi

Mar Sep 06, 2005 12:03 pm

- Sí, mi señora. - Aoshi volvió a cepillarle el pelo a la daimyo. Cuántos samurai podían hacer ese tipo de cosas? Aoshi se sentía muy afortunado y agradecido por la confianza y cercanía que Ryosei depositaba en él. Deseáis que le busque? Por cierto, se rumorea que han asesinado al Campeón Esmeralda. Es cierto? Qué podría pasar ahora?
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Soshi Mishi

Lun Sep 12, 2005 10:07 am

-Oficialmente ha muerto el servidor más grande del Emperador. El problema será más en su propio clan que en el Imperio Esmeralda... a menos que estalle una guerra civil.
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Kitsune Aoshi

Mie Sep 14, 2005 12:03 pm

- Padre me comentó que a él le daba mala espina la situación del Imperio entre el León y la Grulla. Si ha sido un asesinato... no se sabe quién le ha asesinado, verdad? O sí? Qué haremos nosotros? No creo conveniente que el Zorro y la alianza se implique, aunque, por otro lado... la Grulla está al sus de nuestras tierras. El Paso de Beiden, guardado por el Escorpión y las Montañas, nos separan del León. Podriamos apoyar en cierta medida a la Grulla. Al menos disimuladamente. Lo justo para granjearnos su amistad sin provocar al León contra nosotros. Dudo que su Majestad permita una guerra a gran escala, o sí lo haría?
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Soshi Mishi

Dom Sep 18, 2005 12:31 pm

-El Emperador no. Pero cuando en el Trono se atisba aunque sea un resquicio de debilidad, los lobos de la guerra olfatean la sangre y recorren el Imperio Esmeralda. Los odios ancestrales suelen cerrarse en falso por regla general. Como los Usagi y nosotros.
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Soshi Mishi

Dom Sep 25, 2005 3:23 pm

Había poco más que hablar. La situación del Imperio Esmeralda era un polvorín, y parecía que la mecha estaba encendida...
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Soshi Mishi

Dom Sep 25, 2005 3:23 pm

Out:
Tema cerrado.
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